Ocho personas murieron luego de que dos botes se estrellaran frente a la costa de San Diego el sábado por la noche, y las autoridades están buscando lo que creen que son siete víctimas más, dijeron el domingo funcionarios de Bomberos y Rescate de San Diego.
Las autoridades dijeron que sospechaban que los barcos estaban involucrados en el contrabando.
Los botes de panga volcaron alrededor de las 11:30 p.m., dijeron las autoridades, y agregaron que un pasajero de otro bote que había llegado a la orilla de Black’s Beach había llamado al 911 para informar que las víctimas del otro bote estaban en el agua.
«La mujer que llamó dijo que el bote que volcó tenía 15 personas a bordo, pero eso era solo una estimación», según el suboficial de la Guardia Costera de los EE. UU., Richard Brahm.
Funcionarios de los Departamentos de Bomberos y Policía de San Diego, Aduanas y Protección Fronteriza, la Guardia Costera de EE. UU. y rescatistas estatales y locales se encontraban entre los que respondieron a la escena.
El despachador usó la información del GPS del teléfono de la persona que llamó para determinar la ubicación del bote volcado, que según las autoridades estaba aproximadamente a media milla al norte de Black Gold Road en La Jolla.
El primer grupo de socorristas se metió en las aguas a pie cuando la marea alta impedía el acceso a la playa, según información compartida por San Diego Fire and Rescue. A unos cientos de metros de distancia encontraron cuerpos sin vida en un trozo de arena seca, dos botes de panga volcados y varios chalecos salvavidas y barriles de combustible, dijeron las autoridades.
Los rescatistas transportaron los siete cuerpos que encontraron inicialmente en el agua para secar arena, y los oficiales de operaciones aéreas y marítimas de Aduanas y Protección Fronteriza encontraron el octavo cuerpo, dijeron las autoridades.
El suboficial de la Guardia Costera, Eddie Berrios, confirmó que ocho personas estaban muertas y los equipos estaban buscando al menos siete más. No sabía qué tipo de botes eran, pero dijo que las pangas, pequeños botes abiertos con motores fuera de borda que se usan en operaciones de contrabando, a menudo aterrizan allí.
Brahm no sabía si alguien en el segundo bote había resultado herido o si había sido detenido por la Patrulla Fronteriza.
No estaba claro si se habían realizado arrestos y se desconocía la nacionalidad de los pasajeros. Los cruces ilegales se han disparado bajo la presidencia de Joe Biden, con muchos inmigrantes que se entregan a los agentes de la Patrulla Fronteriza y son liberados en los Estados Unidos para llevar sus casos ante un tribunal de inmigración.
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