Santa Fe estaba caido. Andaba as tropezando, as divagando, as a punto de quedarse en la lona para no levantarse más. El técnico Harold Rivera parecía cercado por los malos resultados, por el mal juego y por la presión. Pero cuando el equipo estaba más derrumbado, levantó, agitó su melena de león y rugió a los cuatrovientos que está listo para dar batalla, revivió en La Liga y avanzó en la Copa Sudamericana. Vivir.
Este Santa Fe llegó moribundo al partido contra Águilas de la Copa Sudamericana y lo ganó. Se reunía en forma de grupos. Llegó con bríos al partido de la Liga contra el América y lo ganó, y respiró.
Y fue a Barranquilla a demostrar que en verdad estaba para pelear, y le empató al equipo en el que estrenó el ‘Bolillo’ Gómez. Su siguiente reto será este martes contra el Deportivo Cali de Jorge Luis Pinto, en El Campín (20:00 horas). Una prueba para ver de que es que esta hecho este Santa Fe.
El partido se retrasa media hora por aguacero.
Fernando Gómez, Editorial Cultura EL TIEMPO
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